San Martín de Porres

Martín era hijo de un noble español y de una esclava libre, nació en Perú, en 1579. Al inicio de su juventud aprendió el oficio de auxiliar de barbero, que en aquella época incluía predicados de enfermería. En 1603, entró para la Orden, en el convento de Nuestra Señora del Rosario, en Lima. No teniendo estudios, hizo la profesión religiosa como hermano cooperador. Religioso humilde, piadoso, caritativo, amaba cuidar a los enfermos, hacer el servicio casero del convento. Tenía gran predilección por los animales domésticos. Practicaba perfectamente el ayuno y la abstinencia de carne prescritos por las Constituciones de la Orden. Convivió en la ciudad de Lima con grandes Santos: San Toribio de Mogrovejo, arzobispo de la ciudad, san Francisco Solano, Santa Rosa de Lima y San Juan Macías. Murió el 3 de noviembre de 1639. El capítulo General de la Orden lo proclamó patrono de los hermanos cooperadores, y el Papa Juan XXIII lo canonizó el 5 de mayo de 1962. Martín es popular en las dos Américas. No apenas ejerce la atracción que siempre ejercieron los pequeños, cuando el Señor los quiso glorificar, pero su persona constituyó un símbolo.